¿Qué es la Formación Bonificada y qué beneficios tiene
La formación bonificada es una herramienta clave para el desarrollo de competencias profesionales, tanto para las empresas como para sus trabajadores. Este tipo de formación, también conocida como “Formación Programada”, está regulada por la Fundación Estatal para la Formación en el Empleo (FUNDAE) y el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE). Su principal característica es que permite a las empresas ofrecer formación a sus empleados con un coste reducido o incluso sin coste, mediante la bonificación en las cuotas de la Seguridad Social.
¿Cómo funciona la Formación Bonificada?
Cada año, las empresas disponen de un crédito para formación, calculado en base a las cotizaciones por formación profesional realizadas el año anterior. Este crédito puede ser utilizado para financiar total o parcialmente acciones formativas para sus empleados, las cuales deben estar relacionadas con su puesto de trabajo y orientadas a mejorar sus habilidades y competencias.
Beneficios para las empresas
- Mejora de la competitividad: Al invertir en la formación de sus trabajadores, las empresas aumentan la competitividad, ya que cuentan con un equipo más capacitado para enfrentar los retos del mercado.
- Bonificaciones en las cotizaciones: La formación es prácticamente gratuita para las empresas, ya que el coste de los cursos se deduce de las cotizaciones sociales.
- Adaptabilidad a cambios tecnológicos y organizativos: Las empresas pueden ofrecer formación específica que se ajuste a sus necesidades inmediatas, garantizando que su plantilla esté siempre al día con las últimas tendencias y tecnologías del sector.
- Cofinanciación: Para empresas de diferentes tamaños, existe la posibilidad de cofinanciar la formación. Esto significa que parte de los costes se cubren con la participación del trabajador durante su horario laboral, o bien mediante aportaciones privadas de la empresa.
Beneficios para los trabajadores
- Actualización y mejora de competencias: Los empleados tienen la oportunidad de actualizar sus conocimientos y adquirir nuevas habilidades, lo que les permite desempeñar mejor sus funciones y aumentar su valor en el mercado laboral.
- Oportunidades de desarrollo profesional: A través de esta formación, los trabajadores pueden acceder a certificaciones y cualificaciones que abren nuevas oportunidades de promoción dentro de la empresa o en otros sectores.
- Seguridad laboral: Al mejorar sus competencias, los trabajadores se vuelven más indispensables para la empresa, lo que puede traducirse en una mayor estabilidad laboral.
- Compatibilidad con el trabajo: La formación se puede realizar en modalidades flexibles como presencial, online o mixta, lo que facilita su realización sin afectar la productividad del trabajador.
En resumen, la formación bonificada es una excelente oportunidad para que las empresas inviertan en su activo más importante: sus empleados. A través de este sistema, tanto empresas como trabajadores se benefician de una mejora continua en las competencias profesionales, fomentando el crecimiento personal y empresarial en un entorno cada vez más competitivo.
Este tipo de formación no solo garantiza el éxito a corto plazo, sino que establece las bases para un desarrollo a largo plazo en un entorno empresarial más competitivo y en constante cambio.